SiN TieMpO
Corría el año 2015. Taty (como la llamaban los amigos) se había convertido en toda una mujer de negocios. Era la dueña de grandes almacenes de ropa para damas. La vida la llevó al oficio de comerciante, a pesar de haber estudiado Psicología. Sí, llegó a ejercer como psicóloga, pero quizás por cosas del destino su ocupación profesional dio un vuelco. Las cosas cambiaron y terminó por dirigir las tiendas de ropa femenina más chic de Los Ángeles.
No hay tiempo, si hay tiempo, el tiempo no existe. Cada quien con su teoría… A Taty eso del tiempo no le quitaba el sueño. A sus 35 años (muy bien llevados) se sentía realizada: salud, belleza, un esposo maravilloso, 2 niños adorables, una casa soñada, viajes, éxito profesional. Todo lo que una mujer desearía conseguir.
Corría el año 1990. Taty escribía en su diario sus experiencias de la infancia:
“Hoy Santiago me pidió prestado mi cuaderno de matemáticas, creo que fue una excusa para hablarme. Seguro le gusto y no sabe como decirme. Yo sé que cuando seamos grandes Santiago y yo nos vamos a casar, apenas tenemos 10 años, pero no importa, yo soy paciente…”
El tiempo fue pasando y Taty no dejaba de escribir en su diario, allí podía expresar sin pena todo lo que sentía:
(“Cuando sea grande yo quiero ser…”; “cuando sea grande yo quiero tener…”, “cuando sea grande lo conseguiré…”).
No hay tiempo, si hay tiempo, el tiempo no existe.
Corría el año 2000. A sus 20 años Taty cursaba el segundo año de Psicología. Santiago (su primer amor de la escuela) se había ido a vivir al extranjero. Taty y Santiago no perdieron nunca el contacto, y a pesar de la distancia, se convirtieron en grandes amigos.
El tiempo no se detenía, como cualquier muchacha Taty salía a divertirse, tenía muchos amigos y un espíritu muy alegre. Ya no recordaba mucho sus momentos en la escuela primaria, pero su diario de la infancia (que todavía guardaba bajo llave en su mesita de noche) le permitía de vez en cuando regresar el tiempo atrás…
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Real Academia Española/ T I E M P O:
*Magnitud física que permite ordenar la secuencia de los sucesos, estableciendo un pasado, un presente y un futuro. Su unidad en el Sistema Internacional es el segundo.
*Época durante la cual vive alguien o sucede algo.
*Oportunidad, ocasión o coyuntura de hacer algo.
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Pasado, presente, futuro, segundo, época, vida, oportunidad. No hay tiempo, si hay tiempo, el tiempo no existe.
1 de diciembre. Año 1980. 10:28 a.m. Tatiana Martín tenía 5 minutos de nacida. ¡Sus primeros momentos con el mundo exterior! El tiempo para Tatiana no existía, por lo menos no tenía conciencia para pensar en nada y menos en el tiempo. Pero la naturaleza es muy sabia y justo a los 9 meses de gestación Taty vio la luz. El tiempo sí existe.
Pasado, presente, futuro, segundo, época, vida, oportunidad. No hay tiempo, si hay tiempo, el tiempo no existe.
Corría el año 2040. La mayoría del tiempo ya había transcurrido para Tatiana Martín, por lo menos el tiempo de la eterna juventud. Esa época en la que se piensa que falta mucho para envejecer se convierte en pasado en algún momento de la vida. Pero a Taty seguía sin preocuparle ese tema, ella vivía en un inmortal presente. Claro que el tiempo siempre estaba allí, indetenible, pero ella era del pensamiento que mientras viviera siempre habría tiempo.
Del diario de Tatiana a sus 60 años:
“El tiempo es tiempo. Hay que entenderlo, él pasa para hacernos vivir. Yo he vivido sin hacerle mucho caso al reloj o al calendario, y creo que ha sido lo mejor. He vivido sin pensar cuánto tiempo me queda, más bien pienso en que lo tengo aquí y ahora. Vivo mi presente; el pasado ya pasó. Del futuro no sé nada. Cada segundo cuenta y en conclusión, cada quien vive su tiempo como lo quiere vivir. Rápido (TIC TAC/ TIC TAC/ TIC TAC) o lento (TIIIC TAAAC/ TIIIIC TAAAAC/ TIIIIIC TAAAAAC).
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